jueves, 16 de abril de 2015

AGRADECIDA!

En una tarde hermosa de Abril 2015!!. 


Agradecida de Dios por la vida, la salud, los amigos y hermanos en la FE que me ha regalado, por mis padres, herman@s, toda la familia, por el trabajo, por las crisis, por las heridas que han sanado y por las que están en proceso, por la virtud, por el error, por las tribulaciones, por el servicio, por las rosas y por las espinas, por las risas y llantos, por el aire que respiro, por el mar que pueden ver mis ojos, por quienes están lejos físicamente y que amo y por quienes ya han partido a la Casa del Padre y que han tocado mi vida, por quienes me han ayudado y por quienes no lo hicieron conscientemente; en fin por TODO y por TODOS. 

Estoy convencida que, por más difícil que puedan parecer las "tormentas" por más fuerte que sople el "viento"...Todo, todo, todo OBRA PARA BIEN para los que AMAN a Dios (Rom. 8:28); y Él a todo le saca provecho en nuestro favor, si aguardamos con paciencia, pues su MISERICORDIA es infinita. 

Por eso, vive AGRADECID@ de todo, si te caes pide a Yahvé fuerza para levantarte y sigue adelante..... Pues Dios siempre cumple sus promesas aquí o en el CIELO. 

Vive con AMOR (expresado o no) y recuerda el ejemplo de Jesús quien "pasó" por este mundo haciendo el BIEN. 

Dios te Piensa!

viernes, 26 de septiembre de 2014


Eclesiastés 3, 1-11 

Hay un tiempo para cada cosa 
y todo lo que hacemos bajo el sol tiene su tiempo.
Hay un tiempo para nacer y otro para morir; 
uno para plantar y otro para arrancar lo plantado. 
Hay un tiempo para matar y otro para curar; 
uno para destruir y otro para edificar. 
Hay un tiempo para llorar y otro para reír; 
uno para gemir y otro para bailar. 
Hay un tiempo para lanzar piedras y otro para recogerlas; 
uno para abrazarse y otro para separarse. 
Hay un tiempo para ganar y otro para perder; 
uno para retener y otro para desechar. 
Hay un tiempo para rasgar y otro para coser; 
uno para callar y otro para hablar; 
hay un tiempo para amar y otro para odiar; 
uno para hacer la guerra y otro para hacer la paz.

¿Qué provecho saca el que se afana en su trabajo? He observado todas las tareas que Dios ha encomendado a los hombres para que en ellas se ocupen. 

Todo lo ha hecho Dios a su debido tiempo y le ha dado el mundo al hombre para que reflexione sobre él; pero el hombre no puede abarcar las obras de Dios desde el principio hasta el fin.